• 1. Define de manera clara y detallada los objetivos del problema que requiere una solución innovadora: Así tu equipo sabrá qué tiene que enfrentar.
• 2. Muéstrate comprometido con la resolución del problema, predica con el ejemplo: Si no te notan comprometido con lo que hay que resolver, ellos no lo harán.
• 3. Orienta e instruye a tu equipo durante el desarrollo e implementación de la idea para resolver el problema: a veces es necesario apoyarlos un poco, sólo para que retomen su camino.
• 4. Faculta para que tomen decisiones durante el proceso: tomar decisiones siempre es difícil, apóyalos y oriéntalos para que puedan avanzar.
• 5. Da retroalimentación de la solución implementada, brinda asesoría: Ayúdalos a que sean críticos de los resultados que obtuvieron en su proceso y, en todo caso, puedan corregir o mejorar su proceso de solución de problemas.

Recuerda que, en las actividades diarias, y aún más cuando se requiere soluciones innovadoras, no es necesario que recuerdes a tu equipo todo el tiempo lo que se tiene que hacer. Es muy importante confiar en sus habilidades y fomentar en ellos la responsabilidad.

Esto contribuirá a mejorar el clima de trabajo, logrando producir bienestar y libertad, lo que repercutirá en un equipo mucho más innovador, capaz de hacer frente a problemas complejos y nuevos.